[マニラ／香港 １９日 ロイター] – En febrero pasado, funcionarios del gobierno reunidos en la sala de gestión de crisis del palacio presidencial filipino, ante una fotografía tomada unos días antes, se enfrentaron a una decisión difícil. La foto muestra un buque de guerra chino apuntando con un láser militar a una patrullera filipina en el Mar de China Meridional, donde Filipinas y China disputan reclamaciones territoriales.
¿Deberían provocar la ira del gobierno chino al publicar las fotografías o evitar provocar a sus gigantescos vecinos? Conclusión del Asesor de Seguridad Nacional y Presidente del Grupo de Trabajo sobre el Mar Meridional de China, Eduardo Ano: «El público tiene derecho a publicar las fotografías.
Esta reunión supuso un importante punto de inflexión en el tema de la radiación láser. Esta es la primera vez que salen a la luz los detalles de esta reunión. Esto llevó al gobierno filipino a lanzar una campaña de relaciones públicas para llamar la atención sobre la escalada de disputas territoriales en el Mar de China Meridional.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Jonathan Malaya, que estuvo presente en la reunión y reveló el intercambio, dijo que «esa reunión fue un punto de inflexión y avanzamos hacia una política de énfasis en la transparencia». La nueva política «en última instancia tiene como objetivo ejercer una fuerte presión sobre la reputación, la imagen y la estatura de China».
Según Malaya, el presidente Marcos ha dado instrucciones a los responsables de «reducir el aspecto militar e internacionalizar las cuestiones regionales». Las autoridades lograron esto desplegando la Guardia Costera y permitiendo que periodistas extranjeros los acompañaran en las operaciones de seguridad. «Estos esfuerzos son un componente importante para generar apoyo internacional para Filipinas».
Esta vez, pedimos a 20 personas, incluidos funcionarios de alto nivel de Filipinas y China, diplomáticos y analistas de la región asiática, que revelaran los cambios en la política del gobierno filipino hacia China y su impacto. Según la entrevista, se señaló que las acciones de China, junto con la profundización de la alianza militar de Filipinas con Estados Unidos, son un elemento disuasorio para el expansionismo de Beijing, aumentando el riesgo de participación estadounidense.
Ian Storey, del Instituto ISEAS Yusof Ishak de Singapur, dijo que «China tiene pocas opciones para evitar activar el Tratado de Defensa Mutua entre Estados Unidos y Filipinas y desencadenar un conflicto militar entre China y Estados Unidos».
El Mar de China Meridional es rico en recursos de petróleo y gas natural. El comercio que pasa por esta región asciende a unos 3 billones de dólares (unos 474 billones de yenes) al año. El acceso de Estados Unidos a bases en Filipinas podría tener implicaciones importantes en caso de una contingencia en Taiwán.
En 2016, el Tribunal de Arbitraje de La Haya (Países Bajos), en un caso presentado por Filipinas, concluyó que la línea de nueve trazos de China, una línea fronteriza independiente sobre la cual reclama soberanía, no tenía base en el derecho internacional. Pero China dice que los barcos filipinos están invadiendo aguas en disputa. Advirtió a Marcos, que prestará juramento como presidente en junio de 2022, que no juzgue mal la situación.
Jay Batongbacal, un filipino, dijo: “Es la política arriesgada lo que lleva al poker al límite, y es un juego de engaños y engaños para ver quién se hace con la política arriesgada.
Un portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos dijo que la respuesta abierta del gobierno de Filipinas ha logrado crear conciencia sobre las acciones de China que ignoran el derecho internacional y ponen en peligro a los soldados filipinos. No comentó sobre los riesgos de la participación militar de Estados Unidos, pero dijo que Estados Unidos apoyaría a Filipinas si enfrentara una crisis económica de China.
El 19 de junio, funcionarios del gobierno reunidos en la sala de gestión de crisis del palacio presidencial filipino en febrero pasado, se enfrentaron a una fotografía tomada unos días antes y se enfrentaron a una decisión difícil. La foto muestra un viejo buque de guerra filipino varado en el segundo Thomas Reef. Foto tomada en marzo de 2023 (2024 Reuters/Eloisa López)
<என்னால் இரவில் தூங்க முடியாது>
Filipinas y China están en desacuerdo sobre los derechos territoriales alrededor de Scarborough Shoal (nombre chino: Huangyan Dao) y Second Thomas Reef (nombre filipino: Ayungin Reef, nombre chino: Ren’ai Reef) en el Mar de China Meridional, y la situación está cambiando. . Está aumentando.
Desde 1999, Filipinas ha estacionado un viejo buque de guerra en Second Thomas Shoal y ha estacionado permanentemente un pequeño número de tropas para reforzar sus reclamos territoriales. La parte china utilizó cañones de agua y otros métodos para interceptar barcos de suministro para la unidad y, en marzo, las ventanas de un barco filipino se rompieron y un miembro de la tripulación resultó herido.
En febrero, la parte filipina filmó a un barco chino colocando barreras en la entrada de Scarborough Shoal. Esta semana, ambas partes se culpan mutuamente por una colisión de barcos en el segundo Thomas Reef.
Jay Tariara, portavoz de la Guardia Costera de Filipinas, ha criticado a los funcionarios chinos y a los medios estatales en publicaciones X (anteriormente Twitter), donde a veces publica imágenes de escaramuzas marítimas con drones.
Según Dariara, la campaña de transparencia tuvo éxito y aumentó considerablemente el apoyo a Filipinas. Por otro lado, se dice que China está intentando penetrar al mismo ritmo que antes, a pesar de la escalada de conflictos.
Los funcionarios del gobierno filipino temen que un accidente mortal pueda agravar el conflicto. Esto es lo que a muchos de nosotros nos mantiene despiertos por la noche, dijo José Manuel Romualdez, embajador de Filipinas en Estados Unidos.
Mientras tanto, el gobierno filipino espera evitar las represalias económicas de China. Hace unos 10 años, los plátanos de Filipinas se pudrieron en los puertos chinos porque China llevó a cabo largos controles aduaneros.
China es el segundo mercado de exportación más grande de Filipinas, con exportaciones por un valor de alrededor de 11 mil millones de dólares el año pasado. La proporción de las exportaciones totales alcanza el 14,8%. Es el principal importador, siendo los productos refinados del petróleo y los equipos electrónicos los principales productos.
Romualdez, el embajador en Estados Unidos, dijo que el gobierno filipino cree que China «ve valor en continuar las actividades económicas con nosotros mientras busca una solución pacífica al problema».
Etzel John Ybarra de la Universidad de Filipinas, el Sr. Marcos dijo que China podría verse obligada a adoptar «enfoques duros», como barreras no arancelarias y restricciones al turismo.
Los agresivos esfuerzos de relaciones públicas del gobierno filipino han tomado a sus vecinos por sorpresa. Vietnam y Malasia, que tienen disputas marítimas con China, al igual que Filipinas, han sido más cautelosos a la hora de revelar incidentes de conflicto.
«Todos están observando (la respuesta filipina) de cerca e intercambiando puntos de vista», dijo un diplomático asiático.
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